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Por Nibaldo Calvo Buides
Cuando el 4 de Enero de 2014 (hace un año) el cubano Ángel Ruiz Hernández (foto) inició la impartición de clases de ajedrez a niños y jóvenes de la provincia de Huila, en Angola, le realicé una entrevista para mi blog, en la que mostró su gran satisfacción por este proyecto:
” Volví a ser joven. Hoy tuve la experiencia que todos mis amigos ajedrecistas han tenido en su juventud. La primera clase fue un contagio mutuo. Mueven las piezas y ya. Para estimularlos a pensar y motivarlos practicamos algunas MINIATURAS donde se sacrifican piezas para obtener la victoria. No conocían los sacrificios, eran muchachos con juguetes nuevos. Para la próxima clase ya comenzaré a impartirles clases desde el principio; la idea de hoy fue estimularlos.”
” Volví a ser joven. Hoy tuve la experiencia que todos mis amigos ajedrecistas han tenido en su juventud. La primera clase fue un contagio mutuo. Mueven las piezas y ya. Para estimularlos a pensar y motivarlos practicamos algunas MINIATURAS donde se sacrifican piezas para obtener la victoria. No conocían los sacrificios, eran muchachos con juguetes nuevos. Para la próxima clase ya comenzaré a impartirles clases desde el principio; la idea de hoy fue estimularlos.”
Originario de la provincia de Villa Clara, Ángel trabaja como Técnico en una Empresa Constructora pero no puso impedimentos para estar a cargo de un proyecto de ajedrez con niños y jóvenes angolanos.
En pocos meses aparecieron resultados destacados de sus alumnos en competiciones provinciales y nacionales, siendo el más destacado Pablito, quien clasificó para representar a Angola en el Campeonato Mundial de la Juventud 2014, con sede a Sudáfrica.
Supuestamente quienes dirigen el deporte en la provincia angolana de Huila deberían apoyar a Paulito para participar en ese evento; pero le dieron la espalda, como también le dieron la espalda a Ángel, quien actualmente ya no se encuentra desarrollando el proyecto de ajedrez y hoy recuerda con nostalgia:
“Recuerdo ahora el comienzo del 201. Entusiasmo a más no poder. Comenzaban las clases en el Club Ferroviario de Lubango, Huila. Avances inesperados, triunfos que ni imaginábamos, esfuerzos de profesor, alumnos y al final, la dirigencia del deporte en la provincia no apoyó en nada, se dejó de participar en campeonatos nacionales e incluso a Pablito no se le apoyó como debía. No participó en el Campeonato Mundial de la Juventud 2014. El grupo completo se desintegró. Yo solo no puedo hacer nada. Ojalá alguien se anime para juntos recomenzar el proyecto.”
Tal pareciera que quienes dirigen el deporte en la provincia de Huila, en Angola, sintieran celos por la gran labor que realiza el cubano Ángel, a quien en cierta ocasión lo identifiqué como un Ángel caído del cielo en tierras angolanas, porque le ha permitido conocer el ajedrez a decenas de niños y jóvenes. Les ha permitido pensar diferente, soñar, vivir con nuevas esperanzas.
Hace apenas un año que Ángel dio inicio a este proyecto y me parece increíble que en apenas este tiempo ya los dirigentes deportivos de Huila le den las espaldas al ajedrez, disciplina deportiva que puso en alto el nombre de esa provincia angolana.
PD: En los siguientes enlaces pueden ver 3 entrevistas realizadas a Ángel.
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