Por Arnaldo Calvo Buides
Según estudios, a partir de los 40 años se pierde el 8% de la masa muscular por década. Esta condición se acelera en un 15% a partir de los 70 años.
Se aconseja llevar un estilo de vida saludable, con un aporte suficiente de proteínas, así como realizar actividad física o entrenamiento de resistencia. Además, es importante evitar el exceso de peso y la grasa corporal.
¿Y la mente?, ¿Qué pasa con la memoria a partir de los 40?
A partir de los 40 se inicia la etapa conocida como deterioro cognitivo del cerebro. Pero puede revertirse...
Hace más de 20 años se consideraba al cerebro como un órgano que iba deteriorándose con el paso del tiempo de manera irrecuperable. Hoy en día, múltiples investigaciones demuestran que gracias a lo que se conoce como “plasticidad cerebral” el cerebro sigue construyendo nuevas neuronas durante toda la vida como respuesta a la actividad mental.
¨ Su cerebro está diseñado y fabricado para ser estimulado y desafiado. En general, por la tercera o cuarta década de la vida, su cerebro empieza a deteriorarse", asegura el Dr. Michael Merzenich, profesor emérito de la Universidad de California, que ha sido pionero en la investigación sobre laplasticidad cerebral durante más de 30 años.
Pues, si usted ya anda en los 40`, lo invito a que estimule y desafíe a su cerebro: Juegue ajedrez.
La práctica del ajedrez constituye una importante herramienta para prevenir y/o retrasar el envejecimiento cerebral, asociado a enfermedades degenerativas, como el Alzheimer.
En el 2009, en España, el Hospital Clínico de Valencia, en colaboración con la Federación Valenciana de Ajedrez, realizó un interesante estudio que fue un éxito rotundo. Se trataba de buscar la posible relación del ajedrez como método preventivo frente al Alzheimer, y sus beneficios en el retardo y nivel de gravedad en aquellas personas en que aparecían sus primeros síntomas.
Se incluyeron a 120 personas entre 57 y 87 años (el 75 % de ellos tenía entre 65 y 79 años), y fueron divididos en dos grupos de 60 participantes. Uno de los grupos, casi todos ellos neófitos en ajedrez, recibió clases de este juego una hora y media a la semana durante un año. El otro asistió a otros cursos, pero no al de ajedrez, durante el mismo tiempo.
A ambos se les realizaron pruebas psicotécnicas antes, durante y después de los cursos. Y las conclusiones no dejaron lugar a dudas: El 65% de los integrantes del grupo del ajedrez obtuvo resultados positivos, algunos de ellos espectaculares.
La doctora responsable de la investigación comentó: "Mejoraron sus funciones visioespaciales y su rapidez mental y, en general, eran menos lentos a la hora de procesar la información que recibían". Por cierto, los resultados del segundo grupo también fueron concluyentes: el 0% de los pacientes mostraron cambios positivos en su actividad cerebral.