Por Nibaldo Calvo Buides
*Foto y parte del texto traducido del siguiente enlace que se encuentra en Inglés:http://www.wsj.com/…/majur-juac-once-a-lost-boy-of-sudan-no…
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Majur Juac fue uno de “Los Niños Perdidos de Sudán”, como así se les llamaron a cerca de 20.000 niños que fueron desplazados o huérfanos durante la guerra civil de Sudán, que comenzó en 1983.
Cuando su aldea comenzó a arder, Majur se trasladó a Etiopía. "El viaje de tres meses fue agotador. La mayoría de los niños murieron", dijo. "Estábamos sobreviviendo con los animales salvajes."
Después de cuatro años en Etiopía, 1987-1991, la guerra civil en ese país le obligó a huir de nuevo. Los amigos que no sabían nadar murieron mientras cruzaban el río Gilo infestado de cocodrilos.
"No había mucha comida", recuerda del campamento de refugiados de Kenia, donde vivió durante la década de 1990.
"Comimos una comida al día. Ibas a la escuela por la mañana y no tenías nada que comer hasta las 7 pm. Esperar sin hacer nada era terrible. Pero cuando estoy en un tablero de ajedrez, puedo jugar todo el día sin pensar en comer”.
Majur se trasladó a los Estados Unidos en el 2004, y comenzó a trabajar como guardia de seguridad de un supermercado en Arlington, Virginia. Después del trabajo, jugaba al ajedrez.
"Sólo se puede ir tan lejos con talento natural", explicó. "Hay chicos que estudian ajedrez seis horas al día. Cuando llegué aquí, yo era un jugador de ajedrez decente, pero no sabía cómo escribir notación de ajedrez".
En el 2012, mientras trabajaba como guardia de seguridad en los suburbios de Washington, decidió viajar hasta Nueva York para una visita.
Para su sorpresa, iban a realizar un torneo de ajedrez en Nueva York, en el que un amigo suyo iba a competir. Majur se animó a jugar también..y ganó el torneo!
Entonces Michael Propper, el co-director de la Compañía “New York City Chess Inc.”, que patrocinó el torneo, le preguntó si alguna vez había impartido clases de ajedrez y le dio una tarjeta de presentación. Mr. Propper recordó. "Al día siguiente, llegó con su certificado que demuestra que es un maestro nacional."
Y así fue cómo el ajedrecista sudanés consiguió una plaza de maestro de ajedrez en escuelas públicas y privadas de New York.
Majur Juac, ejemplo de perseverancia, de lucha por la vida y la esperanza.
Cuando su aldea comenzó a arder, Majur se trasladó a Etiopía. "El viaje de tres meses fue agotador. La mayoría de los niños murieron", dijo. "Estábamos sobreviviendo con los animales salvajes."
Después de cuatro años en Etiopía, 1987-1991, la guerra civil en ese país le obligó a huir de nuevo. Los amigos que no sabían nadar murieron mientras cruzaban el río Gilo infestado de cocodrilos.
"No había mucha comida", recuerda del campamento de refugiados de Kenia, donde vivió durante la década de 1990.
"Comimos una comida al día. Ibas a la escuela por la mañana y no tenías nada que comer hasta las 7 pm. Esperar sin hacer nada era terrible. Pero cuando estoy en un tablero de ajedrez, puedo jugar todo el día sin pensar en comer”.
Majur se trasladó a los Estados Unidos en el 2004, y comenzó a trabajar como guardia de seguridad de un supermercado en Arlington, Virginia. Después del trabajo, jugaba al ajedrez.
"Sólo se puede ir tan lejos con talento natural", explicó. "Hay chicos que estudian ajedrez seis horas al día. Cuando llegué aquí, yo era un jugador de ajedrez decente, pero no sabía cómo escribir notación de ajedrez".
En el 2012, mientras trabajaba como guardia de seguridad en los suburbios de Washington, decidió viajar hasta Nueva York para una visita.
Para su sorpresa, iban a realizar un torneo de ajedrez en Nueva York, en el que un amigo suyo iba a competir. Majur se animó a jugar también..y ganó el torneo!
Entonces Michael Propper, el co-director de la Compañía “New York City Chess Inc.”, que patrocinó el torneo, le preguntó si alguna vez había impartido clases de ajedrez y le dio una tarjeta de presentación. Mr. Propper recordó. "Al día siguiente, llegó con su certificado que demuestra que es un maestro nacional."
Y así fue cómo el ajedrecista sudanés consiguió una plaza de maestro de ajedrez en escuelas públicas y privadas de New York.
Majur Juac, ejemplo de perseverancia, de lucha por la vida y la esperanza.
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