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Por Nibaldo Calvo Buides
Llegamos a
determinado nivel de conocimientos en el ajedrez, a base de aprendizaje
constante, de recibir y dar golpes; pero nunca estamos exentos de cometer
errores, de errar en cuestiones que estamos completamente seguro que dominamos
a la perfección.
Pero ese día,
llega el error para recordarnos que somos humanos, que ya sea por exceso de
confianza, por estrés o por desmotivación no hemos visto el básico error. Duele más cuando el error es tema vencido desde nuestros inicios en esta disciplina. Así
es el ajedrez. Bienaventurados somos que cometemos errores; así aprendemos cada día.
Veamos la
siguiente partida entre dos exponentes del ajedrez femenil cubano. En la temprana sexta
jugada sobrevino el error que llevó a la rendición:
Capablanca IM, grupo mixto. Havana, 2001
Blancas: GM Zirka Frómeta (2180)
Negras: MI Yuleikis Fleitas (2226)
1.d4 d5; 2.e3 Cf6; 3.Ad3 e6; 4.f4 c5;
5.c3 b6; 6.Cf3 Aa6??; 7.Axa6 (diagrama), y las negras se
rinden, porque pierden una pieza, tras 7…;Cxa6; 8.Da4+ seguido de 9.Dxa6.
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